Uno de los principales problemas ambientales causados por la minería del carbón es la contaminación del aire. Las operaciones de minería del carbón liberan grandes cantidades de contaminantes a la atmósfera, incluidos dióxido de azufre, óxidos de nitrógeno y partículas. Estos contaminantes pueden contribuir a problemas respiratorios, enfermedades cardíacas y otros problemas de salud. Además, la minería del carbón puede liberar metales pesados y otras sustancias tóxicas al medio ambiente, que pueden contaminar el suelo y el agua y representar un riesgo para la salud de humanos y animales.