*Los hallazgos proporcionan más evidencia de un origen temprano de la vida en la Tierra*
Una nueva investigación dirigida por científicos de la Universidad de California en Riverside ha encontrado evidencia de vida antigua en rocas de 3.200 millones de años de antigüedad de Australia Occidental. Los hallazgos, publicados en la revista *Nature Geoscience*, proporcionan más pruebas de un origen temprano de la vida en la Tierra y sugieren que la vida pudo haber surgido hace 4.200 millones de años, poco después de la formación del planeta.
El equipo de investigadores, dirigido por la Dra. Barbara Cavalazzi, analizó muestras de roca del Cratón de Pilbara en Australia Occidental. Las rocas, que se encuentran entre las más antiguas de la Tierra, contenían pequeñas estructuras esféricas que los investigadores interpretaron como posibles células fosilizadas. Las estructuras se encontraron en una variedad de diferentes tipos de rocas, incluidas arenisca, limolita y pedernal, lo que sugiere que la vida estaba muy extendida en el entorno antiguo.
"El Cratón de Pilbara es una ventana única a la historia temprana de la Tierra", afirmó el Dr. Cavalazzi. "Estas rocas nos permiten vislumbrar cómo era el planeta hace miles de millones de años y ofrecen pistas tentadoras sobre los orígenes de la vida".
Los investigadores utilizaron una variedad de técnicas analíticas para estudiar las estructuras, incluida la microscopía electrónica de barrido, la microscopía electrónica de transmisión y la espectroscopia Raman. Los resultados de estos análisis mostraron que las estructuras estaban compuestas de materia orgánica y que tenían una morfología celular, con pared celular, citoplasma y núcleo.
"Estas estructuras son la evidencia más antigua conocida de vida en la Tierra", dijo el Dr. Cavalazzi. "Proporcionan pruebas sólidas de que la vida surgió muy temprano en la historia del planeta y sugieren que las condiciones para la vida estaban presentes en la Tierra hace 4.200 millones de años".
Los hallazgos tienen implicaciones importantes para nuestra comprensión de los orígenes de la vida en la Tierra. Sugieren que la vida pudo haber surgido mucho antes de lo que se pensaba anteriormente y proporcionan nuevos conocimientos sobre las condiciones necesarias para su surgimiento.
"Estos hallazgos son un gran avance en nuestra comprensión de los orígenes de la vida", afirmó el Dr. Cavalazzi. "Proporcionan más evidencia de que la vida es un fenómeno muy antiguo y sugieren que las condiciones para la vida pueden ser comunes en todo el universo".