1. Corrientes de convección:
- El manto terrestre, situado debajo de la corteza, está compuesto de rocas sólidas pero relativamente débiles. El calor del núcleo de la Tierra hace que el material del manto suba y baje en un proceso conocido como convección.
- A medida que el material caliente del manto asciende, se enfría y se vuelve más denso, lo que hace que vuelva a hundirse. Esto crea un ciclo continuo de ascenso y descenso del material del manto, formando corrientes de convección.
- El movimiento de estas corrientes de convección arrastra las placas tectónicas que se encuentran incrustadas en el manto. Las placas se mueven cuando son empujadas por el material del manto ascendente y tiradas por el material que se hunde.
2. Tectónica de losas (o tracción de losas):
- Las zonas de subducción son áreas donde una placa tectónica desciende debajo de otra. Cuando una placa se hunde en el manto de la Tierra, arrastra consigo al resto de la placa.
- El peso de la placa subductora, junto con las fuerzas gravitacionales que actúan sobre ella a medida que desciende, crea una fuerza de "tracción de losa" que contribuye al movimiento de las placas tectónicas.
La combinación de corrientes de convección dentro del manto y la tectónica de losa proporciona las fuerzas impulsoras para la tectónica de placas, lo que resulta en el movimiento de las placas tectónicas a través de la superficie de la Tierra.