1. Explotación de software: Es posible que el FBI haya descubierto una vulnerabilidad de software en el sistema operativo iOS que les permite eludir las funciones de seguridad y acceder a los datos del dispositivo.
2. Ataque de hardware: Al utilizar herramientas o técnicas especializadas, el FBI podría potencialmente extraer datos de los componentes de hardware del iPhone, como el chip de memoria, sin la necesidad de ejecutar ningún software en el dispositivo.
3. Herramientas de terceros: Es posible que el FBI utilice herramientas o software de piratería de terceros que hayan sido desarrollados específicamente para eludir las medidas de seguridad del iPhone.
4. Ingeniería social: El FBI puede utilizar técnicas de ingeniería social, como phishing o engañar al usuario para que instale software malicioso, para obtener acceso al iPhone.
Vale la pena señalar que el FBI probablemente habría obtenido autorización legal, como una orden de registro, antes de emplear cualquiera de estos métodos para acceder a un iPhone. Además, Apple actualiza periódicamente las funciones de seguridad de sus dispositivos para abordar vulnerabilidades conocidas, lo que dificulta el acceso no autorizado.