* Alta reactividad: El sodio y el potasio son metales alcalinos altamente reactivos. Reaccionan fácilmente con el aire (oxígeno) para formar óxidos y con agua para formar hidróxidos y liberar gas de hidrógeno. Esta reactividad los hace muy inestables en su forma elemental.
* Naturaleza electropositiva: Tanto el sodio como el potasio son altamente electropositivos, lo que significa que pierden fácilmente electrones para convertirse en iones cargados positivamente. Esto los hace propensos a reaccionar con otros elementos, formando compuestos en lugar de existir en su estado metálico puro.
* ocurrencia en compuestos: Estos elementos son de naturaleza abundante, pero casi siempre se encuentran en forma compuesta.
* sodio: Comúnmente encontrado como cloruro de sodio (sal de mesa), nitrato de sodio (encontrado en Chile) y varios otros minerales.
* potasio: Se encuentra en minerales como el cloruro de potasio (Sylvite), el nitrato de potasio (NITER) y el feldespato.
En resumen: La reactividad extrema del sodio y el potasio les hace imposible existir como metales puros en el entorno natural. Siempre se encuentran en combinación con otros elementos, formando varios compuestos.