Acumulación de presión: A medida que aumenta la temperatura alrededor de la lata de aerosol, también aumenta la presión dentro de la lata. Esto se debe a que el aumento de temperatura hace que el propulsor dentro de la lata se expanda.
Puede explotar: Si la presión dentro de la lata excede los límites de seguridad diseñados, la lata podría romperse o explotar. La liberación repentina de gas a alta presión puede impulsar la lata, su contenido y cualquier objeto circundante con gran fuerza.
Fuego y metralla: El propulsor utilizado en las latas de aerosol suele ser inflamable, lo que significa que puede incendiarse fácilmente. Si el aerosol explota cerca de una fuente de calor, el propulsor puede encenderse y provocar un incendio. La lata misma y su contenido también pueden convertirse en metralla, lo que podría causar lesiones graves a cualquiera que se encuentre en las cercanías.
Peligros de inhalación: Los vapores liberados durante la explosión o el incendio pueden contener sustancias químicas tóxicas. La inhalación de estos vapores puede provocar problemas respiratorios, mareos e incluso pérdida del conocimiento.
Daños al edificio: La explosión de un bote de aerosol puede causar daños importantes al entorno. Puede romper ventanas, dañar muebles y equipos e incluso causar daños estructurales al edificio.
Prevención: Para evitar los peligros que supone almacenar botes de spray cerca de fuentes de calor, es imprescindible tomar las siguientes precauciones:
- Guardar los botes de spray en un lugar fresco y seco, alejado de la luz solar directa y de fuentes de calor.
- Mantenga los botes de aerosol alejados de llamas abiertas, superficies calientes o cualquier fuente potencial de ignición.
- Siga las instrucciones de almacenamiento proporcionadas por el fabricante.
- Nunca guardes botes de spray en un vehículo, especialmente en días calurosos, ya que la temperatura dentro del coche puede aumentar rápidamente.
Si sospecha que una lata de aerosol ha estado expuesta a un calor excesivo o está dañada, manipúlela con extrema precaución y deséchela adecuadamente. Nunca perfore, incinere ni caliente una lata de aerosol, incluso si parece vacía.