- Desplazamiento del aire hacia abajo: Este método se puede utilizar para recolectar gases más pesados que el aire, como dióxido de carbono o cloro, a temperatura ambiente. El gas se genera en un matraz o vaso de precipitados y luego se le permite fluir hacia un recipiente invertido colocado sobre él. El gas pesado desplaza el aire más ligero dentro del contenedor y lo llena gradualmente.
- Desplazamiento del agua hacia arriba: Este método es adecuado para recoger gases más ligeros que el agua, como el hidrógeno o el helio. Se invierte un recipiente lleno de agua y se coloca en un recipiente lleno de agua. El gas se genera en un matraz o vaso de precipitados separado y luego se introduce con cuidado en el recipiente volteado hacia arriba a través de un tubo de suministro. Las burbujas de gas que ascienden empujan el agua hacia abajo y ocupan el espacio superior del recipiente.
Ambos métodos se basan en el principio de diferencias de presión y densidad del gas. El gas más pesado que el aire fluye hacia abajo debido a su mayor densidad, mientras que el gas más ligero que el aire asciende desplazando el agua debido a su menor densidad.