* Flexibilidad: Un amplio nicho significa que un organismo puede tolerar una gama más amplia de condiciones ambientales, fuentes de alimentos y hábitats. Esto les da más opciones y las hace menos vulnerables a los cambios en su entorno.
* Adaptabilidad: Los organismos con nichos amplios tienen más probabilidades de adaptarse a las condiciones cambiantes, como el cambio climático o la destrucción del hábitat.
* Resiliencia: Un amplio nicho les permite sobrevivir incluso si sus recursos preferidos se vuelven escasos. Pueden cambiar a fuentes o hábitats de alimentos alternativos.
Los organismos con nichos estrechos son más vulnerables:
* Especialización: Su dependencia de condiciones específicas, alimentos o hábitats los hace muy sensibles a los cambios en el medio ambiente.
* Competencia: Los nichos estrechos aumentan la competencia por los recursos con otras especies que tienen necesidades similares.
* Riesgo de extinción: Si su nicho específico se interrumpe, enfrentan un mayor riesgo de extinción.
Ejemplo:
* nicho estrecho: Un koala, que solo come hojas de eucalipto, es altamente especializada. Si se destruyen los bosques de eucalipto, los koalas tienen un alto riesgo.
* nicho amplio: Un mapache es generalista y come una amplia variedad de alimentos y vive en varios hábitats. Es menos probable que se vean amenazados por los cambios ambientales.
En resumen: Si bien la especialización puede ser ventajosa en entornos estables, los nichos amplios ofrecen una ventaja de supervivencia significativa frente a la variabilidad ambiental.