1. La secuencia de aminoácidos: Esta es la estructura primaria de la proteína. El orden específico de los aminoácidos en una cadena de polipéptidos dicta cómo la cadena se doblará. Ciertos aminoácidos tienen diferentes propiedades (hidrófobos, hidrófilos, cargados, etc.) que influyen en cómo interactúan entre sí y con el entorno circundante.
2. El entorno: Esto incluye factores como:
* Temperatura: Las temperaturas extremas pueden interrumpir los enlaces débiles que mantienen unidas la estructura de la proteína.
* ph: Los cambios en el pH pueden alterar el estado de ionización de los aminoácidos, interrumpiendo las interacciones y el plegamiento.
* Concentración de otras moléculas: Las interacciones con otras moléculas, como las sales, pueden afectar el plegamiento y la estabilidad de la proteína.
Estos dos factores funcionan juntos para crear la forma tridimensional final de la proteína, que es esencial para su función. La forma tridimensional, también conocida como la estructura terciaria , permite que la proteína se una a moléculas específicas, catalice reacciones o realice otras tareas dentro de la célula.