* pedigríes: Estos son árboles familiares que muestran los patrones de herencia de un rasgo particular en múltiples generaciones. Al analizar las relaciones entre los individuos y sus fenotipos (características observables), los genetistas pueden deducir el modo de herencia (por ejemplo, dominante, recesivo, ligado a X).
* Análisis de genotipo: Esto implica determinar los alelos específicos (versiones de los genes) que un individuo lleva para un rasgo particular. Técnicas como la secuenciación de ADN y las pruebas genéticas permiten a los genetistas identificar variaciones genéticas específicas que contribuyen a la herencia de los rasgos.
* Estudios gemelos: Comparar la concordancia (similitud) de los rasgos en gemelos idénticos (monocigóticos) versus gemelos fraternos (dicigóticos) ayuda a distinguir las contribuciones relativas de la genética y el medio ambiente.
* Estudios de asociación de todo el genoma (GWAS): Estos estudios analizan los genomas de grandes poblaciones para identificar variaciones genéticas asociadas con rasgos específicos. Este enfoque es particularmente útil para identificar genes involucrados en rasgos complejos que están influenciados por múltiples genes.
* Modelos animales: Los genetistas a menudo usan modelos animales, como ratones y moscas de frutas, para estudiar los patrones de herencia y la función del gen. Estos modelos permiten experimentos controlados y la manipulación de genes para comprender sus efectos en los rasgos.
Estos métodos, combinados con el análisis estadístico, permiten a los genetistas desentrañar las intrincadas vías de herencia y arrojar luz sobre la base genética de varios rasgos.