Este proceso se utiliza para convertir el nitrógeno atmosférico en amoníaco, que luego se utiliza para producir fertilizantes. El proceso Haber-Bosch es uno de los procesos industriales más importantes del mundo y ha tenido un gran impacto en el suministro mundial de alimentos. Sin embargo, también requiere una gran cantidad de energía y produce gases de efecto invernadero.
2. La quema de combustibles fósiles
Los combustibles fósiles liberan óxidos de nitrógeno a la atmósfera, lo que puede contribuir al smog y la lluvia ácida. Los óxidos de nitrógeno también pueden reaccionar con el amoníaco para formar nitrato de amonio, que es un componente importante de las partículas. Las partículas en suspensión están relacionadas con una serie de problemas respiratorios, como asma, bronquitis y cáncer de pulmón.