Los tejidos conectivos evitan que los órganos se desmoronen. Los tejidos conectivos están formados por células que están separadas entre sí por una gran cantidad de matriz extracelular. La matriz extracelular está formada por proteínas, carbohidratos y agua. Las proteínas de la matriz extracelular forman una red que mantiene unidas las células y proporciona fuerza y soporte al tejido. Los carbohidratos de la matriz extracelular ayudan a retener agua y proporcionar lubricación.