Núcleo: El núcleo es el núcleo central del átomo y contiene protones cargados positivamente y neutrones sin carga. El núcleo es muy denso y contiene la mayor parte de la masa del átomo.
Electrones: Los electrones son partículas cargadas negativamente que orbitan alrededor del núcleo en trayectorias fijas llamadas capas. Cada capa puede contener una cantidad específica de electrones y la cantidad de capas aumenta a medida que se aleja del núcleo.
Capas de electrones: Las capas de electrones están etiquetadas con las letras K, L, M, N, etc. La capa K es la capa más interna y puede contener hasta 2 electrones. La capa L puede contener hasta 8 electrones, la capa M puede contener hasta 18 electrones, y así sucesivamente.
Subcapas de electrones: Las capas de electrones se dividen a su vez en subcapas, que están etiquetadas con las letras s, p, d y f. La subcapa s puede contener hasta 2 electrones, la subcapa p puede contener hasta 6 electrones, la subcapa d puede contener hasta 10 electrones y la subcapa f puede contener hasta 14 electrones.
Configuración electrónica: La configuración electrónica de un átomo describe la disposición de los electrones en las capas y subcapas electrónicas. La configuración electrónica se escribe utilizando las letras de capa y subcapa, seguidas del número de electrones en cada subcapa. Por ejemplo, la configuración electrónica del helio es 1s2, lo que significa que el helio tiene 2 electrones en la capa K, ambos en la subcapa s.
El modelo atómico de Bohr es una representación simplificada del átomo que nos ayuda a comprender la estructura básica de los átomos y cómo interactúan los electrones con el núcleo.