En un avance que podría tener profundas implicaciones para la medicina regenerativa y el tratamiento de enfermedades, los científicos han descubierto una manera de controlar cómo las células madre se convierten en diferentes tipos de células. Los hallazgos, publicados en la revista Nature, podrían abrir nuevas posibilidades para el crecimiento de tejidos y órganos de reemplazo y para comprender cómo se desarrollan enfermedades como el cáncer.
Las células madre son células no especializadas que tienen el potencial de convertirse en cualquier tipo de célula del cuerpo. Esto las convierte en una fuente prometedora de células para trasplantes y medicina regenerativa, pero hasta ahora, los científicos no han podido controlar completamente cómo se desarrollan las células madre.
El nuevo estudio, dirigido por investigadores de la Universidad de Cambridge, encontró que un factor clave en el control del desarrollo de células madre es una proteína llamada TET1. TET1 participa en un proceso llamado desmetilación del ADN, que elimina los grupos metilo del ADN y permite que se expresen los genes.
Los investigadores descubrieron que manipulando la actividad de TET1, podían controlar la expresión de genes implicados en el desarrollo de células madre. Esto les permitió dirigir las células madre para que se desarrollaran en tipos específicos de células, como células cardíacas, nerviosas y hepáticas.
"Este es un avance importante en nuestra comprensión de cómo se desarrollan las células madre", afirmó el Dr. George Daley, director del Programa de Trasplante de Células Madre del Hospital Infantil de Boston. "Al controlar la actividad de TET1, ahora podemos dirigir las células madre para que se conviertan en los tipos específicos de células que necesitamos para los trasplantes y la medicina regenerativa".
Los hallazgos también podrían tener implicaciones para comprender cómo se desarrollan enfermedades como el cáncer. Las células cancerosas a menudo se caracterizan por una expresión genética anormal y los investigadores creen que TET1 puede desempeñar un papel en este proceso.
"Estamos entusiasmados con el potencial de este descubrimiento para revolucionar la medicina regenerativa y nuestra comprensión de enfermedades como el cáncer", afirmó el Dr. Austin Smith, director del Centro Wellcome Trust para la Investigación de Células Madre de la Universidad de Cambridge. "Creemos que TET1 podría ser un objetivo clave para nuevas terapias que puedan aprovechar el poder de las células madre para reparar tejidos y órganos dañados".
Los investigadores ahora están trabajando para desarrollar nuevos medicamentos que puedan atacar a TET1 y controlar el desarrollo de células madre. Creen que estos medicamentos podrían tener el potencial de tratar una amplia gama de enfermedades y lesiones.