El estudio fue realizado en el Instituto de Biología Marina de Hawai'i (HIMB) por investigadores de la Universidad de Hawai'i en Mānoa y la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA). El equipo recolectó larvas de A. tenuis de la bahía de Kaneohe y las expuso a diferentes condiciones de estrés en un entorno de laboratorio controlado.
Uno de los factores estresantes clave examinados fue la acidificación de los océanos, causada por la mayor absorción de dióxido de carbono de la atmósfera por el agua de mar. Los investigadores descubrieron que la exposición a niveles de pH más bajos, que simulaban la acidificación del océano, reducía significativamente la supervivencia y el crecimiento de las larvas de A. tenuis. Esto sugiere que la actual acidificación del océano debido a las actividades humanas representa una amenaza importante para los ecosistemas de arrecifes de coral.
Otro factor estresante investigado en el estudio fue el aumento de temperatura, que está asociado con el cambio climático. Los científicos observaron que las larvas de A. tenuis mostraban una supervivencia y un crecimiento reducidos cuando se exponían a temperaturas elevadas, especialmente durante sus primeras etapas de desarrollo. Esto pone de relieve la vulnerabilidad de los corales al calentamiento de las temperaturas del océano, lo que puede provocar el blanqueamiento de los corales y la degradación de los arrecifes.
Además, el estudio evaluó los efectos del enriquecimiento de nutrientes, una consecuencia común de actividades humanas como la descarga de aguas residuales y la escorrentía agrícola. Los resultados revelaron que la exposición a niveles elevados de nutrientes condujo a un mayor crecimiento de las larvas de A. tenuis, pero también resultó en una supervivencia reducida y un desarrollo esquelético comprometido. Esto sugiere que, si bien el enriquecimiento de nutrientes puede promover inicialmente el crecimiento de los corales, en última instancia puede tener consecuencias negativas para la salud de los corales y la resiliencia de los arrecifes.
Además de estos factores estresantes individuales, los investigadores también examinaron los efectos combinados de la acidificación de los océanos, el aumento de la temperatura y el enriquecimiento de nutrientes. Descubrieron que los factores estresantes combinados tenían un impacto sinérgico, exacerbando los efectos negativos sobre las larvas de A. tenuis en comparación con cada factor estresante actuando solo. Esto resalta la importancia de considerar múltiples factores estresantes al evaluar los impactos generales del cambio climático y las actividades humanas en los arrecifes de coral.
Los hallazgos del estudio subrayan la necesidad urgente de realizar esfuerzos de conservación para proteger los ecosistemas de arrecifes de coral del estrés ambiental. Al comprender cómo responden las larvas de coral a diversos factores estresantes, los científicos y los formuladores de políticas pueden desarrollar estrategias para mitigar los impactos del cambio climático y las actividades humanas, ayudando a preservar estos ambientes marinos invaluables y biodiversos.