El microbioma nativo de las manzanas es un ecosistema complejo de bacterias, hongos y otros microorganismos que viven en la superficie de la fruta. Estos microorganismos juegan un papel importante en la protección de las manzanas contra enfermedades y deterioro. Los antibióticos pueden alterar el microbioma nativo, haciendo que las manzanas sean más susceptibles a enfermedades y deterioro.
Además de alterar el microbioma nativo, los antibióticos también pueden tener un impacto negativo en la salud humana. Los antibióticos pueden provocar efectos secundarios como náuseas, vómitos, diarrea y sarpullido. En casos raros, los antibióticos pueden incluso provocar la muerte.
Por estas razones, no se deben utilizar antibióticos para proteger las manzanas de la niebla del peral y del manzano. En cambio, existen otros métodos que se pueden utilizar para controlar esta enfermedad, como:
* Utilizar variedades de manzana resistentes
* Poda de ramas infectadas
*Aplicar bactericidas
*Usar agentes de control biológico
Estos métodos son más eficaces para controlar la niebla del peral y del manzano y no tienen los mismos efectos negativos sobre el microbioma nativo o la salud humana.