En un estudio reciente publicado en la revista "Nature Cell Biology", investigadores de la Universidad de California en San Francisco (UCSF) han descubierto un nuevo mecanismo que regula la migración celular. El estudio, dirigido por el Dr. Alexander Svitkin, se centra en el papel de la proteína RACK1 en la migración celular.
Se sabe que RACK1 (receptor de quinasa C activada 1) regula varios procesos celulares, incluida la apoptosis y la adhesión celular. Los investigadores de la UCSF descubrieron que RACK1 también desempeña un papel fundamental en la migración celular al controlar la dinámica de las protuberancias de las membranas celulares.
Las protuberancias de las membranas celulares, como los lamelipodios y los filopodios, son esenciales para la migración celular. Estas estructuras se extienden desde el borde anterior de la célula y ayudan a impulsarla hacia adelante. Los investigadores descubrieron que RACK1 está localizado en estas protuberancias e interactúa con una proteína llamada WASP (Proteína del síndrome de Wiskott-Aldrich).
WASP es un regulador clave de la polimerización de actina, un proceso esencial para la formación de protuberancias de las membranas celulares. Se descubrió que RACK1 modula la actividad de WASP, controlando así la dinámica de la polimerización de actina y la formación de protuberancias.
Al controlar la actividad de WASP, RACK1 finalmente afecta la capacidad de la célula para migrar. Los investigadores demostraron que la reducción de los niveles de RACK1 perjudicaba la migración celular, mientras que el aumento de los niveles de RACK1 mejoraba la migración.
El estudio proporciona una comprensión más profunda de los mecanismos moleculares que subyacen a la migración celular. Revela un papel crucial para RACK1 en la regulación de la formación de protuberancias de la membrana celular a través de su interacción con WASP. Este conocimiento puede tener implicaciones para diversos procesos biológicos que dependen de la migración celular, incluida la reparación de tejidos y la respuesta inmune. Se necesitan más investigaciones para explorar las posibles aplicaciones terapéuticas de apuntar a las interacciones RACK1 y WASP en enfermedades en las que la migración celular está alterada o desregulada.