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    Uso de huellas dactilares químicas para combatir el fraude de productos del mar y la pesca ilegal

    Los mariscos son uno de los productos alimenticios más comercializados en el mundo. Crédito:Saya Kimura/Pexels, CC BY

    Los alimentos falsos están invadiendo nuestros supermercados, ya que los alimentos que amamos se sustituyen o adulteran con productos de menor valor o poco éticos.

    El fraude alimentario amenaza la salud humana, pero también es una mala noticia para la industria y la producción sostenible de alimentos. Los productos del mar son uno de los productos alimenticios más comercializados en el mundo y dependen de cadenas de suministro intrincadas que dejan la puerta abierta para el fraude de productos del mar.

    Nuestro nuevo estudio, publicado en la revista Fish and Fisheries , muestra un nuevo enfoque para determinar la procedencia o el "origen" de muchas especies de mariscos.

    Al identificar la procedencia, podemos detectar el fraude y empoderar a las autoridades y empresas para detenerlo. Esto hace que sea más probable que la comida que compras sea, de hecho, la comida que realmente quieres comer.

    Pesca ilegal y fraude marítimo

    Los productos del mar capturados en la naturaleza son vulnerables a la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada.

    La pesca ilegal, no declarada y no reglamentada puede tener un impacto devastador en el medio ambiente marino porque:

    • es una de las principales causas de la sobrepesca, y constituye aproximadamente una quinta parte de los productos del mar
    • puede destruir hábitats marinos, como los arrecifes de coral, a través de métodos de pesca destructivos como el bombardeo y la pesca con cianuro
    • puede dañar significativamente la vida silvestre, como los albatros y las tortugas, que se capturan como captura incidental.

    Entonces, ¿cómo se relaciona la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada con el fraude de productos del mar?

    El fraude de productos del mar permite que prospere este tipo de pesca, ya que los productos ilegales se lavan a través de cadenas de suministro legítimas.

    Un estudio reciente en los Estados Unidos encontró que cuando los productos del mar están mal etiquetados, es más probable que se sustituyan por un producto de pesquerías menos saludables con políticas de manejo que tienen menos probabilidades de reducir los impactos ambientales de la pesca.

    Una revisión de pescados y mariscos mal etiquetados en los EE. UU. encontró que de las 180 especies sustituidas, 25 fueron consideradas amenazadas, en peligro o en peligro crítico por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza y los Recursos Naturales (UICN).

    La pesca ilegal y el fraude de productos del mar también tienen un costo humano. Puede:

    • afectar negativamente los medios de subsistencia de los pescadores respetuosos de la ley y las empresas de productos del mar
    • amenazan la seguridad alimentaria
    • facilitar los abusos de los derechos humanos, como el trabajo forzoso y la piratería
    • aumentar el riesgo de exposición a patógenos, drogas y otras sustancias prohibidas en los mariscos.

    Las huellas químicas en conchas y huesos

    Cada año se captura una amplia gama de animales marinos como alimento, incluidos peces, moluscos, crustáceos y equinodermos.

    Sin embargo, los métodos tradicionales de procedencia de los alimentos suelen estar diseñados para identificar una especie a la vez.

    Eso podría beneficiar a la especie y la industria en cuestión, pero es costoso y requiere mucho tiempo. Como tal, los métodos actuales están restringidos a un número relativamente pequeño de especies.

    En nuestro estudio, describimos un método universal más amplio para identificar la procedencia y detectar el fraude.

    ¿Cómo? Aprovechamos marcadores químicos naturales impresos en las conchas y huesos de animales marinos. Estos marcadores reflejan el entorno de un animal y pueden identificar de dónde son.

    Nos enfocamos en un marcador químico que es similar en muchos animales marinos diferentes. Este marcador químico específico, conocido como "isótopos de oxígeno", está determinado por la composición y la temperatura del océano en lugar de la biología de un animal.

    Aprovechando esta similitud y cómo se relaciona con el entorno local, construimos un mapa oceánico global de isótopos de oxígeno que ayuda a los investigadores a comprender de dónde puede ser un animal marino (haciendo coincidir el valor de isótopo de oxígeno en conchas y huesos con el valor de isótopo de oxígeno en el mapa).

    Después de pruebas rigurosas, demostramos que este mapa global (o "isopaisaje") se puede utilizar para identificar correctamente los orígenes de una amplia gama de animales marinos que viven en diferentes latitudes.

    Por ejemplo, vimos hasta un 90 % de éxito en la clasificación de peces, cefalópodos y mariscos entre las aguas tropicales del sudeste asiático y las aguas más frías del sur de Australia.

    ¿Qué sigue?

    Los isótopos de oxígeno, como marcador universal, funcionaron bien en una variedad de animales recolectados en diferentes latitudes y en amplias áreas geográficas.

    Nuestro siguiente paso es integrar los isótopos de oxígeno con otros marcadores químicos universales para dar pistas sobre la longitud y refinar nuestro enfoque.

    Determinar la procedencia de los productos del mar es un desafío grande y complejo. Ningún enfoque único es una panacea para todas las especies, pesquerías o industrias.

    Pero nuestro enfoque representa un paso hacia un sistema global más inclusivo para validar la procedencia de los productos del mar y combatir el fraude relacionado con los productos del mar.

    Con suerte, esto garantizará que se dejen atrás menos especies marinas y signifique una mayor confianza del consumidor en los productos que compramos. + Explora más

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    Este artículo se vuelve a publicar de The Conversation bajo una licencia Creative Commons. Lea el artículo original.




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