1. Tamaño aparente: El objeto aparecerá más grande . Esto se debe a que el ángulo que subtiende en el ojo del espectador aumenta a medida que disminuye la distancia.
2. Brillo: El objeto aparecerá más brillante . Esto se debe a que la misma cantidad de luz del objeto ahora se concentra en un área más pequeña. El brillo aparente es proporcional al cuadrado inverso de la distancia.
3. Detalles: Se verán más detalles en la superficie del objeto. Esto se debe a que la resolución angular, que es la capacidad de distinguir los detalles finos, mejora a medida que el objeto se acerca.
4. Paralaje: La posición aparente del objeto en el fondo de estrellas más distantes cambiará a medida que el espectador se mueva, un efecto conocido como paralaje. Este efecto solo se nota para objetos relativamente cercanos, como las estrellas dentro de nuestra galaxia.
5. Velocidad: Si el objeto se mueve en relación con el espectador, parecerá moverse más rápido A medida que se acerca. Este es un resultado directo de la distancia disminuida entre el objeto y el espectador.
Ejemplos:
* la luna: Cuando la luna está en su punto más cercano a la tierra (perigeo), parece más grande y brillante que cuando está en su punto más alejado (apogeo).
* Marte: A medida que Marte se acerca a la Tierra durante sus encuentros más cercanos, se vuelve significativamente más brillante y más grande en el cielo nocturno.
* estrellas: Si bien las estrellas son increíblemente distantes, sus posiciones aparentes pueden cambiar ligeramente con el tiempo debido al movimiento de la Tierra alrededor del Sol. Este es el principio detrás de las mediciones de paralaje utilizadas para determinar la distancia a las estrellas.
Es importante tener en cuenta que estos cambios en la apariencia solo se notan cuando el objeto se mueve relativamente cerca del espectador. Para objetos extremadamente distantes, como galaxias o estrellas distantes, los cambios en la apariencia son demasiado sutiles para ser percibidos por el ojo humano.