1. La nebulosa:
- Una nube gigante de gas y polvo, principalmente hidrógeno y helio, existe en el espacio.
- Esta nube, llamada nebulosa, es fría y vasta, se extiende para años luz.
2. Colapso gravitacional:
- Una ligera perturbación, como una onda de choque de una supernova cercana, desencadena el colapso de la nube.
- La gravedad une el gas y las partículas de polvo, lo que hace que la nube gire más rápido.
3. El ProtoSun:
- A medida que la nube gira más rápido, se aplana en forma de disco.
- El centro del disco se vuelve cada vez más denso y caliente.
- Este núcleo caliente y denso finalmente se enciende, formando el sol.
4. Formación de planetesimales:
- En el disco giratorio, las pequeñas partículas de polvo y el hielo chocan y se pegan, formando grupos más grandes llamados planetesimales.
- Estos planetesimales continúan creciendo a través de colisiones adicionales y atracción gravitacional.
5. Formación de planetas:
- Los planetesimales eventualmente crecen lo suficientemente grandes como para convertirse en planetas.
- Los planetas internos (Mercurio, Venus, Tierra, Marte) son principalmente rocosos debido al intenso calor del sol temprano, que vaporizó elementos más ligeros.
- Los planetas exteriores (Júpiter, Saturno, Urano, Neptuno) son gigantes de gas, formados por la acumulación de hielo y gas en las regiones externas más frías del sistema solar.
6. Limpiar el disco:
- Con el tiempo, el intenso viento solar del sol empuja cualquier gas y polvo restantes, dejando atrás los planetas que vemos hoy.
Nota importante: La hipótesis nebular es una teoría ampliamente aceptada, pero está continuamente refinada por nuevas observaciones y avances científicos. Todavía hay algunas preguntas sin respuesta sobre detalles específicos del proceso de formación.