Esta antena fue diseñada originalmente para la investigación de la comunicación por satélite, pero Penzias y Wilson utilizaban para estudiar ondas de radio de la Vía Láctea. Notaron un ruido persistente y de bajo nivel que parecía provenir de todas las direcciones en el cielo, que no podían explicar. Este "ruido" resultó ser el CMB, la radiación sobrante del Big Bang.