1. potencia de recolección de luz: Los telescopios usan espejos o lentes para recolectar una cantidad de luz mucho mayor que el ojo humano. Esto nos permite ver objetos más débiles, como galaxias distantes o estrellas débiles, que son invisibles a simple vista. Cuanto más grande sea el espejo o lente principal del telescopio, más luz puede recolectar y más débil los objetos que puede detectar.
2. Aumento: Los telescopios pueden magnificar objetos distantes, haciéndolos parecer más de cerca y más grandes. Esto nos permite ver más detalles en estos objetos, como los anillos de Saturno o los Cráteres en la Luna. Sin embargo, el aumento no es el único factor para determinar la claridad de una imagen. La calidad de la óptica y las condiciones de ver también juegan un papel importante.