1. Solsticio de Verano (Día Polar)
- Durante el solsticio de verano, que se produce alrededor del 21 de junio en el hemisferio norte y el 21 de diciembre en el hemisferio sur, los rayos del sol inciden casi continuamente en las zonas polares.
- Los rayos del Sol inciden en la Tierra casi paralelos al horizonte, lo que provoca largas horas de luz diurna o incluso 24 horas de luz solar en las regiones ártica y antártica.
- Este período se conoce como "Día Polar" o "Sol de Medianoche", y el sol permanece visible incluso a medianoche.
2. Solsticio de Invierno (Noche Polar)
- Durante el solsticio de invierno, los rayos del sol apenas llegan a las zonas polares.
- Los rayos del Sol inciden sobre la Tierra en un ángulo muy bajo, lo que da como resultado una luz solar directa limitada o nula durante varias semanas.
- Este período se conoce como la "Noche Polar", donde el sol permanece debajo del horizonte durante un período prolongado, lo que provoca largos períodos de oscuridad.
3. Equinoccios (Día y Noche Iguales)
- Durante los equinoccios de primavera y otoño (20 y 21 de marzo y 22 y 23 de septiembre), el eje de la Tierra no está inclinado hacia el sol ni en sentido contrario, y el día y la noche tienen la misma duración.
- Los rayos del sol inciden en las regiones polares en un ángulo intermedio, lo que permite períodos aproximadamente iguales de luz y oscuridad.
4. Períodos transitorios
- Entre las condiciones extremas del solsticio de verano y el solsticio de invierno, las zonas polares experimentan períodos de transición de luz diurna que aumenta o disminuye gradualmente.
- A medida que el eje de la Tierra se inclina, el ángulo del sol cambia, lo que provoca variaciones en la duración de la luz solar y la oscuridad.