En su tesis doctoral de 1924, De Broglie propuso que toda la materia, incluidos los electrones, exhibe propiedades en forma de onda. Esta era una idea revolucionaria en ese momento, ya que desafió la comprensión clásica de la materia como puramente partículas.
Su hipótesis, más tarde confirmada por observaciones experimentales como el experimento Davisson-Germer, sentó las bases para la mecánica cuántica.