- Son reversibles. Esto significa que la sustancia original se puede restaurar a partir de la sustancia modificada.
- No modifican la composición química de la sustancia. Esto significa que los átomos de la sustancia permanecen iguales antes y después del cambio.
- Pueden observarse sin cambiar la identidad de la sustancia. Por ejemplo, puedes observar un cambio en el tamaño, la forma o el color de una sustancia sin cambiar lo que es.
Ejemplos comunes de cambios físicos incluyen fusión, congelación, ebullición, evaporación, condensación y sublimación.