Otro desafío para los algoritmos de reconocimiento facial es lidiar con las variaciones en la apariencia facial. Por ejemplo, el rostro de una persona puede cambiar significativamente con el tiempo debido al envejecimiento, el aumento o pérdida de peso o cambios en el peinado. Los algoritmos de reconocimiento facial deben poder tener en cuenta estos cambios para poder identificar con precisión a las personas a lo largo del tiempo.
Además, los algoritmos de reconocimiento facial pueden verse engañados por disfraces, como gafas de sol, sombreros o máscaras. Esto dificulta el uso de sistemas de reconocimiento facial para identificar a personas que intentan ocultar sus identidades.
A pesar de estos desafíos, los algoritmos de reconocimiento facial son cada vez más precisos. En los últimos años, se han producido mejoras significativas en el rendimiento de los algoritmos de reconocimiento facial en grandes conjuntos de datos. Sin embargo, todavía hay margen de mejora y es importante ser consciente de las limitaciones de la tecnología de reconocimiento facial antes de utilizarla para aplicaciones críticas.
A continuación se muestran algunos ejemplos específicos de cómo se han utilizado los algoritmos de reconocimiento facial para identificar individuos en grandes poblaciones:
* En 2017, el gobierno chino utilizó tecnología de reconocimiento facial para identificar y arrestar a un fugitivo que había estado prófugo durante 23 años.
* En 2018, el gobierno indio utilizó tecnología de reconocimiento facial para identificar y arrestar a un terrorista responsable de un atentado con bomba que mató a 44 personas.
* En 2019, la policía británica utilizó tecnología de reconocimiento facial para identificar y arrestar a un hombre que había estado acosando a mujeres en la calle.
Estos son sólo algunos ejemplos de cómo se utiliza la tecnología de reconocimiento facial para identificar individuos en grandes poblaciones. A medida que la tecnología siga mejorando, es probable que se utilice aún más ampliamente en el futuro.