Un secreto de cómo la tuberculosis se queda contigo es su capacidad para formar granulomas. Los granulomas son conjuntos de células inmunitarias que se forman alrededor de las bacterias, creando una barrera protectora que impide que el sistema inmunológico destruya las bacterias. Esto permite que la tuberculosis persista en el cuerpo durante largos períodos de tiempo, incluso si la persona no está activamente enferma. Cuando el sistema inmunológico está debilitado, la tuberculosis puede activarse y causar síntomas de enfermedad.