La sociodiversidad (la diversidad de opiniones, ideas y comportamientos humanos) es una fuerza impulsora detrás de muchos avances positivos.
"Cuando diferentes personas se unen, siempre que no tengan malas intenciones, surgen nuevas ideas que pueden fomentar la innovación y contribuir a la prosperidad económica", explica Dirk Helbing, profesor externo del Complexity Science Hub y profesor de la ETH Zurich. . Por tanto, mantener o incluso promover la sociodiversidad juega un papel importante. ¿Pero cómo se puede lograr esto?
En un estudio publicado recientemente en el Journal of the Royal Society Open Science , Helbing y su colega encontraron evidencia de que la sociodiversidad es menor en las redes sociales centralizadas, donde unas pocas figuras clave están conectadas con muchas personas.
En realidad, las redes están muy centralizadas, especialmente en plataformas como Instagram y X, donde es posible tener un gran número de seguidores y donde algunas celebridades tienen muchos seguidores, según los investigadores. La mayoría de las personas en estas redes tienen comparativamente pocos seguidores, mientras que unos pocos seleccionados cuentan con números sustanciales.
"Esto se ve reforzado por el hecho de que las personas que ya tienen muchos seguidores son más visibles y rápidamente ganan aún más seguidores", afirma Andrea Musso de CSH y ETH. Este llamado efecto Matthew, también conocido como "efecto de ricos se hacen más ricos", aumenta la centralización en la red. A su vez, la centralización destruye los nichos que protegen las opiniones minoritarias. En consecuencia, la centralización reduce la sociodiversidad, según el estudio.
"En las redes sociales centralizadas, las opiniones minoritarias son fácilmente desplazadas por las opiniones mayoritarias. Esto a veces puede significar que se pierdan ideas valiosas y que las corrientes dominantes tomen el control. Pero esto no es garantía de buenas soluciones", explica Helbing. "De hecho, las redes sociales deberían ofrecer espacios seguros, donde se puedan desarrollar nuevas ideas sin tener que competir con la corriente principal de inmediato".
"Cuando las personas forman parte de un grupo que comparte sus creencias, las nuevas ideas pueden sobrevivir durante más tiempo. De lo contrario, es probable que acaben conformándose con la mayoría. Pero entonces, la innovación no tiene ninguna posibilidad", afirma Musso. "Es importante destacar que ese apoyo grupal depende de la red social de una persona y no de la aceptación general de la idea".
"Las redes que promueven la sociodiversidad tienen características estructurales que protegen las opiniones de las minorías", concluye Helbing.
Más información: Andrea Musso et al, Cómo las redes dan forma a la diversidad para bien o para mal, Royal Society Open Science (2024). DOI:10.1098/rsos.230505
Información de la revista: Ciencia abierta de la Royal Society
Proporcionado por Complexity Science Hub