1. Océanos: Los océanos absorben una gran cantidad de CO2 de la atmósfera. Este proceso se llama acidificación oceánica, que puede tener impactos negativos en la vida marina.
2. Suelo: Los microorganismos del suelo, como las bacterias y los hongos, descomponen la materia orgánica y la liberación de CO2, pero también absorben CO2 durante el proceso de respiración.
3. Meteorización de rocas: La meteorización química de las rocas, especialmente los carbonatos como la piedra caliza, absorbe el CO2 de la atmósfera.
4. Fregaderos hechos por humanos: Algunas actividades humanas, como las tecnologías de captura y almacenamiento de carbono (CCS), están diseñadas para eliminar el CO2 de la atmósfera y almacenarlo bajo tierra.
5. Procesos industriales: Algunos procesos industriales, como la producción de cemento, la liberación de CO2, pero otros, como la producción de biocombustibles, pueden absorber potencialmente CO2.
Por lo tanto, si bien las plantas son cruciales para la absorción de carbono, es importante recordar que el ciclo del carbono es complejo e implica varios procesos biológicos, geológicos y impulsados por los humanos.