1. El colapso de la Civilización Maya (c. 900 CE): Se cree que una combinación de factores, incluida la sequía prolongada y la deforestación, contribuyó al declive y al eventual colapso de la civilización maya en la península de Yucatán. La sequía condujo a la escasez de alimentos, los disturbios sociales y, en última instancia, al abandono de las principales ciudades. Esto demuestra cómo el cambio climático puede alterar los sistemas agrícolas y tener un efecto en cascada en las sociedades.
2. La "Little Ice Age" (1300-1850 CE): Este período de temperaturas más frías tuvo impactos significativos en la historia europea. Las fallas de los cultivos y la hambruna se volvieron más frecuentes, lo que llevó a los disturbios sociales y contribuyó al declive de la muerte negra. La "Little Ice Age" también obligó a las personas a adaptar sus prácticas agrícolas y condujo a la innovación en áreas como la calefacción y la ropa.
3. Las conquistas mongolas (siglo XIII): Algunos historiadores argumentan que un período de condiciones climáticas inusualmente favorables, incluido un clima leve y una lluvia abundante, contribuyó al éxito de las conquistas mongoles. Estas condiciones favorables permitieron una mayor productividad agrícola y una base de población más grande, lo que a su vez alimentó la expansión militar mongol. Esto muestra cómo el clima puede influir en el poder económico y militar.