* La posición del cuerpo de la persona: Una persona que ingresa a la cabeza de agua tiene un riesgo mucho mayor de lesiones fatales que alguien que ingresa primero los pies.
* La profundidad del agua: Las aguas poco profundas pueden causar más lesiones de impacto que las aguas más profundas.
* La temperatura del agua: El agua fría puede causar shock e hipotermia, lo que dificulta la supervivencia.
* La salud y el estado físico de la persona: Una persona fuerte y sana tiene una mejor oportunidad de supervivencia que alguien que es débil o herido.
* Otros factores: La presencia de corrientes, escombros u otros peligros también puede afectar la supervivencia.
Ha habido algunos casos documentados de supervivencia después de caídas de alturas increíbles:
* Gary Connery: En 2012, sobrevivió a un salto de 2.400 pies con un traje de alas. Aterrizó en un campo de heno, pero incluso con las precauciones de seguridad, el impacto fue intenso.
* Vesna Vlović: Una azafata que sobrevivió a un accidente aéreo en 1972. Cayó de 33,330 pies sin paracaídas y aterrizó en la nieve, aunque sufrió heridas graves. Su supervivencia se considera un milagro médico.
Es importante tener en cuenta: Estos casos son extremadamente raros, e intentar replicarlos es extremadamente peligroso. Caer de cualquier altura hacia el agua es un riesgo grave y debe evitarse.