1. Disponibilidad:
La disponibilidad de ciertos alimentos en un entorno particular tiene un gran impacto en la elección de alimentos. Factores como la accesibilidad, la asequibilidad y las preferencias culturales influyen en los tipos de alimentos que están fácilmente disponibles y se consumen en un área determinada. Por ejemplo, las personas que viven en regiones costeras pueden tener un acceso más fácil a los productos del mar, mientras que las de zonas rurales pueden tener opciones limitadas debido a los desafíos de transporte y distribución.
2. Comercialización de alimentos:
La industria alimentaria influye mucho en la elección de alimentos a través de estrategias de marketing. La publicidad, el embalaje y la promoción pueden moldear las preferencias y los patrones de consumo de los consumidores. Las empresas suelen utilizar técnicas persuasivas para promover alimentos no saludables, haciéndolos parecer más atractivos y deseables. Esto puede llevar a las personas a tomar decisiones basadas en respuestas emocionales o impulsivas en lugar de en el valor nutricional.
3. Factores sociales y culturales:
Las normas, tradiciones y creencias sociales y culturales desempeñan un papel crucial a la hora de determinar las elecciones alimentarias. Los antecedentes culturales, las prácticas religiosas y las costumbres familiares pueden moldear los hábitos alimentarios de un individuo. Las interacciones sociales, como cenar con compañeros o familiares, también pueden influir en las preferencias alimentarias y las conductas alimentarias.
4. Entorno físico:
El entorno físico, incluido el entorno construido y el acceso a espacios verdes, puede afectar las elecciones de alimentos. Por ejemplo, los vecindarios con acceso limitado a tiendas de comestibles o mercados de agricultores pueden fomentar la dependencia de las comidas procesadas o rápidas. Por otro lado, las áreas con parques e instalaciones recreativas bien mantenidas pueden promover la actividad física y opciones de alimentos más saludables.
5. Factores Económicos:
Los factores económicos, como el nivel de ingresos y el estatus socioeconómico, pueden influir en la elección de alimentos. Las personas con ingresos más bajos pueden tener acceso limitado a alimentos nutritivos debido a costos más altos o disponibilidad limitada en sus vecindarios. Esto puede llevar a depender de alimentos menos costosos y ricos en energía que pueden ser menos nutritivos.
6. Política y regulación:
Las políticas y regulaciones gubernamentales pueden moldear el entorno alimentario e influir en las elecciones de alimentos. Las políticas relacionadas con la agricultura, la seguridad alimentaria, el etiquetado nutricional y las restricciones a la comercialización de alimentos no saludables pueden afectar la disponibilidad, accesibilidad y asequibilidad de ciertos alimentos y, en última instancia, afectar las elecciones de los consumidores.
7. Desiertos alimentarios:
Los desiertos alimentarios son áreas con acceso limitado a alimentos nutritivos y asequibles, que a menudo se encuentran en comunidades de bajos ingresos. La ausencia de supermercados, mercados de agricultores u otras fuentes de alimentos saludables puede llevar a depender de tiendas de conveniencia o establecimientos de comida rápida, lo que contribuye a malas elecciones dietéticas y disparidades en la salud.
8. Influencia de los compañeros:
La influencia de los pares, especialmente entre niños y adolescentes, puede afectar significativamente la elección de alimentos. La presión social para ajustarse a los hábitos y preferencias alimentarias de sus compañeros puede anular las preferencias o intenciones individuales de comer de forma saludable.
9. Influencia de los medios:
Los medios de comunicación, incluidos la televisión, la prensa escrita y las redes sociales, pueden influir en la elección de alimentos al promover ciertos alimentos, respaldar dietas específicas y moldear percepciones culturales sobre lo que se considera saludable o deseable.
10. Educación alimentaria y alfabetización nutricional:
El nivel de educación alimentaria y conocimientos nutricionales en un entorno determinado puede afectar la elección de alimentos. El acceso a información precisa sobre nutrición y prácticas alimentarias saludables permite a las personas tomar decisiones informadas sobre sus elecciones de alimentos.
Al comprender las diversas influencias ambientales en la elección de alimentos, las personas y los formuladores de políticas pueden tomar medidas para promover entornos alimentarios más saludables y fomentar hábitos alimentarios más saludables.