Las escamas de las yemas son hojas modificadas que protegen los delicados tejidos embrionarios dentro de la yema de la desecación, daños mecánicos y fluctuaciones de temperatura. Son particularmente importantes en ambientes hostiles, como desiertos o climas fríos, donde pueden ayudar a que el cogollo sobreviva hasta que las condiciones sean más favorables para el crecimiento.
Aislamiento
Además de protección, las escamas de las yemas también proporcionan aislamiento a las yemas. Esto es importante en climas fríos, donde las escamas pueden ayudar a evitar que los cogollos se congelen. En climas cálidos, las escamas pueden ayudar a reflejar la luz del sol y evitar que el cogollo se sobrecaliente.
Impermeabilización
Las escamas de los cogollos también son impermeables, lo que ayuda a evitar que los cogollos se sequen. Esto es importante en climas secos, donde el agua es escasa.
Almacenamiento
Las escamas de las yemas también pueden almacenar comida y agua para las yemas en desarrollo. Esto es importante para los cogollos que se forman en el otoño y deben sobrevivir el invierno sin nuevos crecimientos.
Las escamas de las yemas desempeñan un papel importante en la supervivencia y el desarrollo de las plantas leñosas. Proporcionan protección, aislamiento, impermeabilización y almacenamiento, todos ellos esenciales para el crecimiento y la reproducción de la planta.