Durante siglos, la gente ha estado fascinada por la atracción aparentemente suicida de la polilla hacia las llamas. Ahora, los científicos finalmente han descubierto la base genética de este comportamiento.
En un estudio publicado en la revista Nature, investigadores de la Universidad de Washington y el Instituto Max Planck de Ecología Química en Alemania identificaron un gen que es específicamente responsable de la atracción de las polillas por la luz. El gen, llamado "Optomotor-Blind", está ubicado en el cromosoma Y y codifica una proteína que participa en el sistema visual de la polilla.
Cuando el gen Optomotor-Blind muta, las polillas ya no se sienten atraídas por la luz. Esto sugiere que el gen desempeña un papel en la capacidad de la polilla para percibir y responder a señales luminosas.
El estudio también encontró que el gen Optomotor-Blind se expresa con más fuerza en las polillas macho que en las hembras. Esto sugiere que el gen puede estar involucrado en el comportamiento sexual de la polilla.
Las polillas macho usan la luz para atraer parejas. Producen una feromona que atrae a las polillas hembra y también utilizan señales luminosas para comunicarse entre sí. El gen Optomotor-Blind puede ayudar a las polillas macho a encontrar pareja permitiéndoles ver y responder a señales luminosas.
El descubrimiento del gen Optomotor-Blind es un gran avance en nuestra comprensión del comportamiento de las polillas. Proporciona un nuevo objetivo para la investigación sobre el control de las polillas y podría conducir al desarrollo de nuevas formas de evitar que las polillas dañen los cultivos y otras propiedades.
Además de sus implicaciones para el control de las polillas, el estudio también tiene implicaciones más amplias para nuestra comprensión del comportamiento animal. Muestra que los genes pueden desempeñar un papel específico en comportamientos complejos, como la atracción de pareja. Este hallazgo podría ayudarnos a comprender cómo se comportan otros animales, incluidos los humanos.