La pesca de arrastre de fondo puede causar grandes daños a los hábitats marinos
La pesca de arrastre de fondo implica arrastrar una red pesada a lo largo del fondo marino, que puede dañar los hábitats bentónicos y los organismos que viven en ellos. Los estudios han demostrado que la pesca de arrastre de fondo puede destruir arrecifes de coral, praderas marinas y otros ecosistemas importantes. También puede matar o herir a peces, mamíferos marinos y tortugas marinas.
Los impactos de la pesca de arrastre de fondo pueden ser duraderos
Los daños causados por la pesca de arrastre de fondo pueden tardar años o incluso décadas en recuperarse. Por ejemplo, un estudio encontró que se necesitaron 15 años para que un arrecife de coral se recuperara del daño causado por la pesca de arrastre de fondo.
Existen algunos ejemplos de prácticas sostenibles de pesca de arrastre de fondo
Si bien la pesca de arrastre de fondo puede ser destructiva, se han desarrollado algunos ejemplos de prácticas sostenibles de pesca de arrastre de fondo. Estas prácticas incluyen el uso de redes más ligeras, evitar áreas sensibles y limitar la cantidad de tiempo que las redes pasan en el fondo marino. Otras herramientas utilizadas para este propósito son el uso de “arrastre de pulso”, el uso de mallas más grandes para evitar que los juveniles sean capturados involuntariamente y el despliegue de medidas de mitigación de la captura incidental.
¿Es posible la pesca de arrastre sostenible en los fondos marinos?
La evidencia sugiere que la pesca de arrastre sostenible en los fondos marinos es posible, pero requiere una gestión cuidadosa y el uso de medidas de mitigación para minimizar los impactos ambientales. Sin embargo, algunos sostienen que incluso la pesca de arrastre de fondo sostenible puede tener impactos negativos en el medio marino y que deberían utilizarse otros métodos de pesca siempre que sea posible.