Otra teoría sugiere que el agua pudo haberse originado en el interior de la Tierra. Las erupciones volcánicas y los respiraderos hidrotermales pueden haber liberado vapor de agua a la atmósfera, que finalmente se condensó y formó océanos y otros cuerpos de agua.
También es posible que una combinación de estos procesos haya contribuido al contenido de agua de la Tierra. Con el tiempo, el agua de la Tierra se ha reciclado a través de la atmósfera, los océanos y la tierra mediante el proceso del ciclo del agua.