Cultivos sembrados con labranza cero. Crédito:Universidad de Córdoba
La actividad agraria es responsable de alrededor del 12% del total de emisiones de gases de efecto invernadero en España. Sin embargo, la adopción de buenas prácticas agrícolas puede ayudar a revertir esta situación, aumentando el secuestro de carbono orgánico en el suelo. Con el objetivo de compensar el CO 2 emisiones producidas por la actividad agrícola mediante la fijación de carbono orgánico en el suelo, surgió la iniciativa 4perMille, en el marco del Acuerdo Climático de París (adoptado en la COP21 en 2015).
La Agricultura de Conservación utiliza prácticas como la agricultura sin labranza (siembra sin haber labrado previamente el suelo), haciendo uso de la cubierta orgánica del suelo y cultivos rotativos, que son beneficiosos para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. En esta vena, Profesor del Departamento de Ingeniería Rural, en la Escuela de Ingeniería Agrícola y Forestal, Universidad de Córdoba, Emilio J. González, en el grupo de Mecanización y Tecnología Rural GI AGR 126, participó en el proyecto trabajando con el equipo de la Dra. Rafaela Ordóñez, del Área de Agricultura y Medio Ambiente del Instituto de Investigación y Formación Agraria. Analizaron el potencial de la Agricultura de Conservación para alcanzar el objetivo de aumentar el carbono orgánico en el suelo en un 0,4% anual. que es el principal objetivo de la iniciativa 4perMille. Aplicando el modelo Carbon Benefit Project, diseñado por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, Llegaron a la conclusión de que al utilizar la agricultura sin labranza para cultivos extensivos, Los niveles de secuestro de carbono podrían alcanzar hasta tres veces el monto objetivo del acuerdo.
Después de comparar la situación de la agricultura convencional basada en labranza pesada con los datos del modelo basado en una situación de agricultura sin labranza con cultivos extensivos (granos, girasol, legumbres cultivos forrajeros), aparecieron regiones donde el secuestro de carbono podría triplicar la cantidad fijada por la iniciativa 4permille, lugares como el valle del Guadalquivir, Navarra, Aragón y Cataluña. Con este estudio, La capacidad de la agricultura de conservación para mitigar el cambio climático se ha contrastado científicamente, y al hacerlo, se ofrecen herramientas para políticas de gestión agrícola como la Política Agrícola Común (PAC) de la Unión Europea, que actualmente se encuentra en debate sobre objetivos verdes centrados en la mitigación y adaptación al cambio climático. Este estudio se encuentra dentro del proyecto europeo LIFE Agromitiga, cuyo objetivo es contribuir al cambio hacia un sistema agrícola bajo en carbono.
Conservacion del suelo
Además de aumentar el secuestro de carbono orgánico, El uso de la agricultura sin labranza y otras prácticas de agricultura de conservación significa reducir la erosión del suelo hasta en un 95%. De este modo, También se está abordando el principal problema ambiental de este país. La pérdida de suelo es especialmente marcada en las cuencas de los ríos Guadalquivir y Ebro.
Grandes comunidades dedicadas a la agricultura, por lo tanto, se beneficiarán enormemente de la aplicación de la Agricultura de Conservación, que tiene más de 700, 000 ha de cultivos extensivos en España, convirtiéndolo en el país europeo con mayor aplicación de estas técnicas.
Si continuamos por este camino, No solo aumentaremos las ventajas ambientales para el entorno y la sociedad, sino también aumentar la viabilidad financiera de las granjas, fincas que mantendrán su activo clave de producción, tierra, y también ahorrará trabajo y costos de combustible.