Water Weathering:
* abrasión: El agua transporta sedimentos como arena y guijarros, que actúan como papel de lija, que se muelen en las superficies de roca. Esto es especialmente efectivo en ríos y corrientes de flujo rápido.
* congelarse: El agua se expande cuando se congela. Si el agua se filtra en grietas en rocas y luego se congela, la expansión ejerce presión sobre la roca, lo que hace que se agrieta y finalmente se separe. Esto se llama Frost Wedging.
* meteorización química: El agua puede disolver ciertos minerales en rocas, como la piedra caliza. Esto debilita la roca y facilita la descomposición. El agua de lluvia es ligeramente ácida, lo que ayuda a disolver algunos minerales.
* Hidrólisis: El agua puede reaccionar químicamente con algunos minerales en rocas, cambiando su composición y haciéndolos más débiles.
Wind Weathering:
* abrasión: El viento lleva partículas de arena y polvo, que pueden actuar como papel de lija y desgastar superficies de roca. Esto es particularmente efectivo en ambientes desérticos donde hay mucho viento y arena suelta.
* Deflación: El viento puede recoger y llevar el sedimento suelto, dejando atrás una superficie desinflada. Esto puede exponer el lecho de roca a más meteorización.
* desgaste: A medida que el viento lleva las partículas de arena y polvo, chocan entre sí y se descomponen. Esto crea un sedimento más fino, que luego puede ser llevado aún más por el viento y continuar desgastando las superficies de roca.
El efecto combinado:
Tanto el agua como la meteorización de viento a menudo trabajan juntas para descomponer las rocas. Por ejemplo, los ciclos de congelación-descongelación pueden crear grietas en rocas, que luego se ensanchan por abrasión por agua o viento.
En general, el desglose de las rocas por agua y viento es un proceso lento y gradual, pero durante largos períodos de tiempo, puede alterar dramáticamente el paisaje.