por textura:
* Foliado: Estas rocas tienen una apariencia en capas o bandas debido a la alineación de minerales platy como Mica durante el metamorfismo.
* Slate: De grano fino, con una superficie lisa y plana.
* Phyllite: Similar a la pizarra pero con una superficie ligeramente más brillante y ondulada.
* esquisto: De grano grueso, con cristales visibles y capas distintas.
* Gneiss: Bandada, con capas alternas de luz y oscuras de minerales.
* no foliado: Estas rocas carecen de una estructura en capas porque están compuestas de minerales que no se alinean fácilmente durante el metamorfismo.
* mármol: Formado de piedra caliza, a menudo blanca o gris, se puede vetar.
* cuarcita: Formado a partir de arenisca, duro y resistente, a menudo blanco o rosa.
* Hornfels: De grano fino y a menudo oscuro, formado por el metamorfismo de contacto.
* Serpentinite: Roca de color verdoso a menudo asociada con la actividad tectónica.
* Anfibolita: Roca de color oscuro con minerales como Hornblende y Plagioclase.
por composición:
Si bien las clasificaciones anteriores basadas en la textura se utilizan ampliamente, algunas rocas metamórficas se clasifican en función de su composición química. Por ejemplo:
* rocas calcáreas: Estas rocas contienen carbonato de calcio (CaCO3) y a menudo se asocian con mármol.
* rocas ricas en cuarzo: Estas rocas están dominadas por cuarzo, como la cuarcita.
* rocas máficas: Estas rocas contienen cantidades significativas de magnesio y hierro, como la anfibolita.
* rocas felsic: Estas rocas son ricas en sílice y aluminio, como algunos gneis.
Es importante tener en cuenta: Hay cierta superposición entre la textura y las clasificaciones basadas en la composición. Por ejemplo, el mármol no es a la vez foliado y calcáreo.
En general, comprender la textura y la composición de las rocas metamórficas es crucial para identificarlas e interpretar su historial de formación.