* rocas ígneas: Como granito, basalto y riolita.
* rocas sedimentarias: Como arenisca, piedra caliza y lutita.
* rocas metamórficas: Como Slate, Schist y Gneiss.
Los minerales específicos que forman arcilla (como caolinita, illite y montmorillonita) se crean a través de procesos de meteorización química que descomponen los minerales originales en estas rocas parentales.
Por lo tanto, la roca principal de arcilla no es un solo tipo de roca, sino una variedad de rocas que han sufrido meteorización y alteración química.