1. Edad y rayas magnéticas:
* rocas más jóvenes en la cresta: Las rocas recolectadas del Valle Central son las más jóvenes, envejeciendo progresivamente a medida que te alejas de la cresta. Este patrón demuestra la creación continua de nueva corteza oceánica en la cresta.
* rayas magnéticas: El fondo marino exhibe rayas alternativas de polaridad magnética normal e invertida. Esto se debe al campo magnético de la Tierra volteando periódicamente. Estas rayas son simétricas sobre el valle central y reflejan las inversiones de campo magnético registradas en rocas en tierra. Este patrón simétrico proporciona una fuerte evidencia para la propagación del fondo marino, donde se crea una nueva corteza en la cresta, llevando estas firmas magnéticas lejos del centro.
2. Composición y estructura:
* basalto: Las rocas consisten principalmente en basalto, una roca volcánica formada a partir del enfriamiento del magma rápidamente. Este tipo de roca es característico de la corteza oceánica y no se encuentra en la corteza continental.
* Basalto de almohada: La presencia de basalto de almohadas, formada por lava en erupción bajo el agua, refuerza aún más el origen oceánico de las rocas.
* Dikes en hoja: Estas son intrusiones verticales y tabulares de magma que se solidifican dentro de las grietas en la roca existente. Los diques con láminas se encuentran cerca del valle central e indican el movimiento ascendente del magma desde el manto.
3. Valles de fallas y grietas:
* Fallos de transformación: El sistema de cresta del océano medio se divide en segmentos conectados por fallas de transformación. Estas fallas crean compensaciones distintivas en la cresta, lo que indica el movimiento de las placas lejos del otro.
* Central Rift Valley: La presencia de un valle central de la grieta a lo largo de la cresta es una clara indicación de la separación de las placas tectónicas. Magma se eleva del manto para llenar este vacío, creando una nueva corteza oceánica.
En resumen, la combinación de edad, rayas magnéticas, composición, estructura y patrones de fallas en rocas del valle central de la cresta del océano medio proporciona un argumento fuerte y consistente para la propagación del piso marino. Estas observaciones han sido fundamentales para comprender la dinámica de la tectónica de placas y la evolución continua de la superficie de la Tierra.