1. Los límites están inactivos o muy lentos:
* Límites convergentes: Las placas pueden estar colisionando muy lentamente, o la colisión puede acomodarse por plegamiento y elevación en lugar de rupturas repentinas. Este podría ser el caso con algunas cadenas montañosas antiguas donde la colisión inicial se ha ralentizado significativamente.
* límites divergentes: Las placas pueden estar separadas muy lentamente, lo que lleva a una ampliación gradual de la grieta sin una actividad sísmica significativa. Este podría ser el caso con algunas zonas de grietas en sus etapas iniciales de desarrollo.
* Transformar límites: Las placas pueden estar deslizándose entre sí muy lentamente, y la fricción se reduce por la presencia de fluidos lubricantes o una gruesa capa de sedimentos.
2. El área podría estar experimentando una fluencia asísmica:
* Este es un tipo de movimiento lento y gradual a lo largo de una falla sin ningún terremoto notable. A menudo se observa en áreas donde el estrés se acumula lentamente y se libera gradualmente a través del movimiento continuo.
3. Los límites de la placa pueden estar profundamente enterrados bajo sedimentos gruesos:
* La presencia de capas de sedimentos gruesos puede amortiguar las ondas sísmicas y hacerlas más difíciles de detectar. Incluso si ocurren terremotos, pueden ser demasiado débiles o demasiado profundos para ser registrados por instrumentos de superficie.
4. Los datos pueden estar incompletos:
* También es posible que simplemente no haya suficientes estaciones de monitoreo sísmico en el área para detectar cualquier terremoto que pueda estar ocurriendo. Esto es más probable en áreas remotas o menos pobladas.
En conclusión, un área con muchos límites de placa y baja actividad sísmica es una anomalía que requiere una mayor investigación para comprender las condiciones y procesos geológicos específicos involucrados.