He aquí por qué:
* Lava viscosa: Las lavas felsicas, como la riolita y la dacita, tienen un alto contenido de sílice. Esto los hace muy gruesos y pegajosos, como la miel o la mantequilla de maní. Esta viscosidad es crucial para la formación del domo, ya que la lava no fluye fácilmente y se acumula en su lugar.
* Composición felsica: Las lavas felsicas son ricas en sílice, aluminio, potasio y sodio. Tienen puntos de fusión más altos que las lavas máficas (como el basalto), lo que contribuye a su caudal lento.
¿Por qué no otros tipos de lava?
* lava máfica: El basalto, una lava máfica, es menos viscosa y fluye más fácilmente. No se acumularía para formar una cúpula. En cambio, crearía flujos más planos o volcanes de escudo.
* lava ultramática: Komatiite, una lava ultramática, es extremadamente caliente y fluida. No formaría una cúpula, sino flujos de movimiento rápido y bastante rápido.
En resumen: La naturaleza gruesa y pegajosa de la lava felsica es lo que le permite solidificarse y acumularse en las estructuras de cúpula que vemos.