Oro: El oro es un metal blando, amarillo, muy maleable y dúctil. Se utiliza a menudo en joyería y otros artículos decorativos.
Plata: La plata es otro metal blanco blando, maleable y dúctil. También se utiliza en joyería y otros artículos decorativos, así como en componentes eléctricos y electrónicos.
Cobre: El cobre es un metal de color marrón rojizo, maleable y dúctil. Se utiliza en una amplia variedad de aplicaciones, incluido cableado eléctrico, plomería y construcción.
Aluminio: El aluminio es un metal ligero, maleable y dúctil. Se utiliza en una variedad de aplicaciones, incluidas latas de alimentos y bebidas, aviones y materiales de construcción.
Zinc: El zinc es un metal de color blanco azulado, maleable y dúctil. Se utiliza en una variedad de aplicaciones, incluido acero galvanizado, baterías y pinturas.
Estos son sólo algunos ejemplos de minerales maleables y dúctiles. Estas propiedades los hacen útiles en una amplia gama de aplicaciones, desde joyería y artículos decorativos hasta componentes eléctricos y electrónicos y materiales de construcción.