Las fuertes lluvias provocaron inundaciones repentinas en algunas zonas y provocaron que varios ríos y arroyos se desbordaran. La tormenta también trajo fuertes vientos y granizo a la región.
Análisis de imágenes satelitales TRMM:
El producto TRMM de Análisis de Precipitación Multisatélite (TMPA) proporciona estimaciones de lluvia de múltiples satélites cada tres horas. Los datos de precipitación de TMPA, combinados con otros datos, se utilizan para crear imágenes satelitales TRMM.
El análisis de datos del TRMM muestra que las precipitaciones más intensas cayeron sobre las montañas de Sierra Nevada y el Valle Central de California. En algunas áreas se estimaron precipitaciones totales de más de 15 pulgadas (38 centímetros).
Las imágenes del TRMM también muestran que el sistema de tormentas se extendía desde Nevada hasta el Océano Pacífico. El sistema de tormentas era largo y estrecho, con un borde de ataque bien definido. El borde de ataque de la tormenta estuvo asociado con una línea de tormentas eléctricas.
Los datos del TRMM pueden ayudar a los pronosticadores a rastrear el movimiento de la tormenta y predecir dónde es probable que se produzcan las precipitaciones más intensas. Los datos del TRMM se están utilizando para ayudar con los esfuerzos de preparación y respuesta a inundaciones.
Inundaciones repentinas:
Las fuertes lluvias del sistema de tormentas provocaron inundaciones repentinas en varias áreas del oeste de EE. UU. Las inundaciones repentinas ocurren cuando un río o arroyo se desborda de sus orillas e inunda las áreas circundantes. Las inundaciones repentinas pueden ser muy peligrosas y causar grandes daños.
Inundaciones de ríos:
Las fuertes lluvias también provocaron que varios ríos y arroyos se desbordaran. Las inundaciones de los ríos pueden causar daños importantes a la propiedad y pueden ser una amenaza para la vida.
Fuertes vientos y granizo:
La tormenta también trajo fuertes vientos y granizo a la región. Los vientos fuertes pueden derribar árboles y líneas eléctricas, y pueden causar daños a los edificios. El granizo puede dañar cultivos y vehículos.