Las olas y la mezcla desempeñan un papel clave en el impulso de los sistemas de surgencias costeras. Las olas generan corrientes que transportan el agua lejos de la costa, y esto crea una región de baja presión cerca de la costa. Esta baja presión extrae agua de las profundidades del océano, que reemplaza el agua que ha sido transportada por las olas.
La cantidad de afloramiento que se produce depende de varios factores, incluida la fuerza de las olas, la dirección del viento y la forma de la costa. En general, el afloramiento es más fuerte cuando el oleaje es fuerte y el viento sopla hacia la orilla. También es más probable que se produzcan afloramientos a lo largo de costas rectas que a lo largo de costas irregulares.
Los sistemas de surgencias costeras se encuentran en muchas partes del mundo, pero son particularmente comunes a lo largo de las costas occidentales de los continentes. Algunos de los sistemas de surgencias costeras más conocidos incluyen la corriente de California, la corriente de Humboldt y la corriente de Benguela.
Estos sistemas son importantes para los ecosistemas marinos porque proporcionan una fuente de nutrientes para el fitoplancton. El fitoplancton es la base de la cadena alimentaria y es esencial para la supervivencia de toda la vida marina. Los sistemas de surgencias costeras también desempeñan un papel en la regulación del clima. Ayudan a enfriar el océano y a transportar el calor fuera de los trópicos.
Además de su importancia para los ecosistemas marinos y la regulación del clima, los sistemas de surgencias costeras también son una fuente de actividad económica. Apoyan una variedad de pesquerías comerciales y también se utilizan para la acuicultura.