Una de las conclusiones clave del volcado de WikiLeaks de la CIA es la eficacia del cifrado para proteger datos confidenciales. A pesar de las sofisticadas técnicas y recursos de la CIA, muchos de los documentos filtrados permanecieron cifrados e inaccesibles. Esto demuestra la importancia de un cifrado sólido como herramienta fundamental para salvaguardar la información confidencial, tanto para individuos como para organizaciones. Al implementar un cifrado sólido, las personas y las organizaciones pueden reducir significativamente el riesgo de acceso no autorizado a sus datos.