1. Tamaño y forma:
* Moléculas pequeñas: Las moléculas más pequeñas pueden pasar a través de la membrana celular más fácilmente que las más grandes. Por ejemplo, el agua, el oxígeno y el dióxido de carbono son lo suficientemente pequeños como para difundirse fácilmente.
* moléculas no polares: Las moléculas no polares (como los lípidos) pueden cruzar fácilmente la bicapa lipídica de la membrana celular.
2. Polaridad:
* moléculas hidrófobas (no polares): Estas moléculas se disuelven fácilmente en la bicapa lipídica de la membrana celular y, por lo tanto, pueden difundirse fácilmente.
* moléculas hidrófilas (polares): Estas moléculas son repelidas por la bicapa lipídica. Es posible que necesiten ayuda de las proteínas de membrana (por ejemplo, proteínas de canal o proteínas portadoras) para pasar a través de la membrana.
3. Gradiente de concentración:
* Concentración alta a baja: Los compuestos se mueven de áreas de alta concentración a áreas de baja concentración, después del gradiente de concentración. Este movimiento no requiere energía y se considera transporte pasivo.
Ejemplos de compuestos que se difunden fácilmente en la celda:
* oxígeno (O2): Pequeña molécula no polar que se difunde fácilmente en las células para la respiración.
* dióxido de carbono (CO2): Pequeña molécula no polar que se difunde de las células como un producto de desecho de la respiración.
* hormonas esteroides: Moléculas no polares que pueden cruzar fácilmente la membrana celular.
* ácidos grasos: Moléculas no polares que se absorben fácilmente en las células.
* agua (H2O): Pequeña molécula polar que puede pasar a través de la membrana celular, aunque puede ser asistida por acuaporinas.
Nota importante:
* La membrana celular es selectivamente permeable, lo que significa que permite que algunas moléculas pasen mientras bloquean otras. Esta selectividad es esencial para mantener la homeostasis celular.
* Si bien algunas moléculas pueden difundirse fácilmente a través de la membrana, otras requieren mecanismos de transporte activos, lo que requiere energía para mover moléculas contra su gradiente de concentración.