He aquí por qué esto es crucial:
* Salud pública: Las fuentes de agua pueden contener naturalmente microbios que pueden enfermarnos. Estos incluyen bacterias como E. coli, que pueden causar enfermedades graves, y virus como el norovirus, que pueden conducir a vómitos y diarrea.
* Prevención de brotes de enfermedades: El cloro elimina efectivamente estos microorganismos nocivos, evitando brotes generalizados de enfermedades transmitidas por el agua como fiebre tifoidea, cólera y disentería.
* Manteniendo la calidad del agua: El cloro también actúa como un desinfectante, evitando el crecimiento de algas y otros microorganismos que pueden afectar la calidad y el sabor del agua.
Es importante tener en cuenta que:
* La cantidad de cloro agregada al agua está cuidadosamente regulada para garantizar que sea efectiva pero no dañina.
* Si bien el olor a cloro es notable, la cantidad es generalmente segura para el consumo.
* Si le preocupa el sabor de cloro, puede usar un lanzador de filtro o instalar un filtro en su toque.
En resumen, el cloro es un componente vital para garantizar la seguridad y la calidad de nuestra agua potable, protegiéndonos de microorganismos potencialmente peligrosos.