* más ligero que el aire: El hidrógeno es el elemento más ligero y tiene una densidad significativamente menor que el aire. Esto significa que un gran volumen de gas de hidrógeno puede levantar un peso considerable, lo que lo hace ideal para levantar aeronaves.
* Abundante y relativamente barato: El hidrógeno fue relativamente fácil y económico de producir a principios del siglo XX. Podría crearse mediante electrólisis de agua o reaccionando varios productos químicos.
* Tecnología temprana: En los primeros días del desarrollo de la aeronave, el helio no estaba ampliamente disponible o asequible. Solo se descubrió en 1868 y siguió siendo difícil de extraer hasta la década de 1920. El hidrógeno era la única opción práctica.
Sin embargo, el hidrógeno también tiene una gran desventaja:
* Altamente inflamable: El hidrógeno es altamente inflamable, lo que lo hace increíblemente peligroso para los viajes de aeronave. Varios zepelinos llenos de hidrógeno sufrieron incendios catastróficos, especialmente el desastre de Hindenburg en 1937.
El desastre de Hindenburg finalmente condujo a la eliminación de hidrógeno en aeronaves y la adopción del helio como el gas de elevación primario. El helio es significativamente más seguro, no es inflamable, aunque es más costoso y menos flotante que el hidrógeno.